Después de estos años de incertidumbre, La anfitriona, en esta ocasión quería invitar a sus amigos más especiales a disfrutar de una cena intima, sin interrupciones, sin ruido, por eso decidió que el mejor lugar era su casa. Deseaba no hacer nada, solo disfrutar. Por ello decidió contratar una chef.

Nos juntamos en su casa para confeccionar un menú a su gusto.  A partir de aquí comienza mi trabajo de organización, compras y elaboración.

Una vez analizado el menú, y estudiado los tiempos que necesito para su cocinado, le comento sobre que hora iré a su casa a cocinar.

La víspera y el día del evento hago las compras necesarias para el menú.

El día de la cena, me presento en su casa, tomo posesión de la cocina y comienzo a realizar las preparaciones de los diferentes platos.

La mesa en esta ocasión la ha colocado la anfitriona a su gusto, pero si hubiera sido necesario la hubiera puesto yo o la persona de servicio si la hubiera.

Comienza el servicio y el camarero en este caso, les prepara unos cocktails según van llegando los invitados.

Llega la hora de la cena y los comensales se sientan a degustar el menú, en esta ocasión consta de cinco entrantes, continua con un plato principal de pescado y termina con un postre dulce y una tabla de quesos.

Según voy terminando y empatando los platos, voy recogiendo la cocina. En cuanto termina el servicio, recojo, pongo el friegaplatos, limpio las encimeras y toda la cocina.  La dejo como me la he encontrado, limpia y recogida.

Me despido de los anfitriones y sus invitados, recojo mis utensilios y me voy.

En esta ocasión han quedado super satisfechos.

¿te gustaría contratar mi servicio?  Estoy deseando hacerte una propuesta. contacta conmigo sin compromiso.